Conflictos de derechos constitucionales y soluciones

AutorGuillermo Lariguet
Cargo del AutorProfesor de Filosofía del Derecho en la Universidad Nacional de Córdoba e Investigador de Conicet, Argentina
Páginas259-287
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CONFLICTOS DE DERECHOS CONSTITUCIONALES Y SOLUCIONES
Capítulo IV
CONFLICTOS DE DERECHOS CONSTITUCIONALES
Y SOLUCIONES
Introducción
Merced a los capítulos anteriores es posible afirmar que
los dilemas son una forma de conflicto normativo, esto es, de
incompatibilidad normativa.
Así definidos, los dilemas no se diferencian visiblemente
de los conflictos normativos simpliciter. Esto produce cierta
insatisfacción en aquellos que defendemos que los dilemas
comportan un “plus” a la idea de un conflicto normativo
simpliciter.
La intuición que he defendido es que si los dilemas exhi-
ben un plus, la caracterización de los mismos sólo en términos
de conflicto normativo resulta cuestionable. Esta caracteriza-
ción no agota el concepto de dilema.
Pero, ¿dónde localizar el “plus”? Dos son las estrategias de
respuesta que he descrito. La primera mantiene que el plus se
encuentra en la “ausencia de criterios, escalas o procedimien-
tos” para resolver el conflicto normativo. Es decir, conforme
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GUILLERMO LARIGUET
a esta estrategia un ‘dilema’ es igual a “conflicto normativo”
más “ausencia de criterios, escalas o procedimientos”.
Como sostuve, esta estrategia posee un grano de verdad.
Pero no posee todos los granos necesarios. Ello se advierte
cuando se presta atención a la segunda estrategia, que es
aquella en la que he hecho hincapié. Conforme esta estrategia,
la “ausencia de criterios” no es un criterio universal y estable
para captar el desafío surgido de la fenomenología compleja
de los dilemas. Ello porque pueden existir hipótesis en que
estos criterios existan; sin embargo, el dilema persista. Aunque
considero que ambas estrategias no tienen porqué repelerse
sino que, al contrario, pueden complementarse, el énfasis de
este trabajo está puesto en la segunda estrategia.
El énfasis en la segunda estrategia es necesario porque sirve
para revisar un puñado de ideas sostenidas dogmáticamente. Una
de estas ideas es que, dado que hay conflictos que tienen solución,
entonces la pregunta por el desafío de los dilemas es un sinsentido.
Esto es un error. Mi estrategia muestra que del hecho que haya
una solución al conflicto, es decir, que haya “criterios, escalas
o procedimientos” para resolverlo, no se sigue que tal solución
resulte irreprochable. Muchas soluciones se dan con sacrificio.
Es posible, por cierto, admitir la distinción entre distintos
tipos de sacrificio: los habrá más o menos significativos, a todo-
nada o minimizadores, también más o menos justificados, etc.
Pretendo extrapolar esta discusión a un campo como el de los
conflictos de derechos constitucionales287 que resulta de interés
tanto para filósofos morales, políticos o jurídicos, como para
teóricos constitucionales.
287 A veces me referiré a estos conflictos simplemente como “conflictos de
derechos”.

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