La seguridad y el derecho a vivir en paz en las zonas rurales
| Autor | Renato Levaggi T. |
| Cargo | Abogado por la PUC |
| Páginas | 23-26 |
23
SETIEMBRE de 2022
Pensar en serio
los comités de autodefensa
La cita del epígrafe es una de las
de la Comisión de la Verdad y Re-
conciliación (CVR), de agosto de
2003. En dicho capítulo, el informe
de la CVR da cuenta, de manera
detallada, del rol de los comités de
autodefensa (CAD), destaca su labor
armado interno, describe los excesos
en los que incurrieron al ejercer sus
funciones y reflexiona acerca de
la complejidad del futuro de estas
organizaciones en un escenario de
paz. El informe de la CVR sostiene,
con una clara postura en favor de la
desmilitarización, que el futuro de los
CAD requiere respuestas acordes a la
complejidad que encarnan.
Pero lo que ha hecho el Congreso de
la República al aprobar la Ley 31494,
norma que reconoce a los comités de
autodefensa y desarrollo rural y los
incorpora en el sistema de seguridad
ciudadana, es todo lo contrario. Sin
ninguna noción de la realidad, esta ley
impulsa la militarización de los terri-
torios rurales al promover la creación
las comunidades campesinas, comu-
nidades nativas y centros poblados
rurales, cuando el contexto en estos
territorios es otro.
Desconoce, por ejemplo, el im-
portante rol que cumplen las rondas
campesinas en la seguridad y adminis-
tración de justicia en las zonas rurales.
Sistema Nacional de Seguridad Ciuda-
dana, colocando a un representante de
los CAD en todos los niveles de este
La seguridad y el derecho a vivir
en paz en las zonas rurales
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sistema (incluyendo el Consejo Nacio-
nal y los comités regionales), cuando
las rondas campesinas solo cuentan con
representantes en los ámbitos provin-
cial y distrital. Sin restar importancia a
los CAD que aún funcionan en regiones
como Ayacucho, no se comprende la
razón de otorgar dicha posición a una
organización que no cuenta con una
representatividad de nivel nacional.
Junto al ejemplo descrito, la norma
presenta serios problemas relacionados
con la presencia de las fuerzas armadas
en el orden interno, la obligación del
Estado de proteger a la población y la
violación a la autonomía y autodeter-
minación de los pueblos indígenas,
sin perder de vista que la ley no fue
objeto de consulta previa, pese a
afectar directamente los derechos de
estas poblaciones. Pero, más allá de
estos temas e importantes detalles
Un reto aparte es la desmilitarización de la vida cotidiana y
la construcción de una cultura de paz que rompa el círculo
de reproducción de la violencia política en la vida comunal y
familiar, lo cual se traduce en autoritarismo e impunidad en
el hogar y en la comunidad.
Informe final de la CVR, 2003.
Foto Andina
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