Secretos + y secretos ?

Por juan paredes castro. editor central de políticaEl mayor problema del gobierno no es solo su mala comunicación, hacia afuera y hacia adentro, sino también su manejo a veces torpe de la reserva y el secreto. No es extraño, por eso, que un alto funcionario del régimen y un ciudadano de a pie compartan lo mismo: su desinformación y perplejidad sobre muchos asuntos del Estado, que como en toda democracia son asuntos públicos y que, por consiguiente, no pueden ser tratados como privados.El miércoles último, tres instancias de poder (desde la canciller Eda Rivas hasta al presidente Ollanta Humala, pasando por el primer ministro Juan Jiménez) dieron una típica demostración del modo anómalo y contradictorio con que el gobierno administra precisamente algunos asuntos de gobierno y Estado, incluso domésticos, y cómo comunica sus juicios de hecho y de valor respecto de los mismos.Ese día Humala desautorizó por la noche las declaraciones que hicieran a pleno día Rivas y Jiménez. Ambos habían coincidido en la necesidad de evaluar la compra de un nuevo avión presidencial.Rivas y Jiménez habrían difundido sus puntos de vista sin que mediara consulta alguna con el presidente. ¿Cómo así funcionarios como ellos decidieron de pronto hablar abiertamente de un tema (la posible compra de un nuevo avión presidencial) que Humala quizás guardaba en reserva o en secreto? Basta la experiencia del controvertido uso del avión presidencial durante el régimen de Alejandro Toledo, y la otra de haber sido puesto en subasta pública bajo la administración de García, para comprender que todo lo que atañe a este medio de transporte acarrea una interiorización política venenosa.Por lo visto que la desautorización presidencial, con su...

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