Putin: sueños de un candidato

Por Juan Velit Granda. Internacionalista

La lección que dejó la última justa electoral para el Legislativo en el pueblo ruso es una mancha que podría deslegitimar la presidencia de Vladimir Putin, el candidato que se alza con la mayor opción, como lo demuestran las últimas encuestas.

El primer ministro ruso no admitiría que sus sueños de grandeza y de cesarismo se vean ensombrecidos por un cuestionamiento internacional a su elección y por ello su promesa de que las elecciones presidenciales, a realizarse el 4 de marzo del presente año, sean una fiesta de civismo y transparencia en su país es un compromiso sagrado.

Sin lugar a dudas, y con las discrepancias respectivas aparte, Putin es el político de mayor peso específico en su país. Su visión de política interna y de reforma del Estado como del rol que debe desempeñar la clase media en el desarrollo de Rusia son de una claridad excepcional e incomparable con la de los otros actores políticos.

Desde hace algún tiempo venía anunciando su concepción geoestratégica de la realidad rusa y había manifestado que el esquema de un único polo de fuerza en el mundo es incapaz de garantizar la seguridad y la paz global, y que se estaría viviendo el final de la unipolaridad.

Pero sus aspiraciones de regir los destinos de Rusia y que su país tenga un rol protagónico en la escena mundial los plasmó en un artículo que es una suerte de hoja de ruta y que ha levantado gran polvareda en Occidente...

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