Un país a la deriva

Por Virginia Rosas Ribeyro. Analista Internacional

Un país a la deriva, deprimido y sin un proyecto colectivo. En eso se ha convertido Italia, tercera economía de la zona euro en recesión desde hace dos años, con una deuda de más de dos mil millones de euros, el equivalente al 127%de su PBI.

Que el Movimiento 5 Estrellas, que dirige el cómico demagogo Beppe Grillo (Pepe Grillo), se haya convertido en el primer partido del país, con el 25,5% de votos en la Cámara de Diputados y 23,8% en Senadores, no hace sino reflejar el desencanto de los electores hacia una clase política incapaz de trabajar en conjunto por un proyecto nacional.

El gran fiasco de estas elecciones fue el ex primer ministro Mario Monti, que obtuvo apenas el 10,5% de los votos con su formación de centristas y al que se le acusa ahora de haberle robado votos a la izquierda, sin haber con eso impedido que Silvio Berlusconi obtuviera un buen resultado.

Monti pensaba que si ninguna fuerza política alcanzaba una mayoría absoluta, él se presentaría como el arcángel salvador, capaz de formar un gobierno de coalición que venciera al inefable Berlusconi. Nada más lejos de los resultados. El último ex primer ministro resultó el principal perdedor de esta contienda. ¿Ceguera política o exceso de vanidad?

Lo cierto es que un abismo separa a la...

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