Maximizando las pérdidas

No pocas veces, cuando ponderamos un evento espinoso y complejo, el peor consejero puede ser nuestra ignorancia. Aun cuando intuyamos que seremos nosotros mismos los que pagaremos las facturas. La liquidación de la empresa Doe Run Perú ?decidida por unanimidad por sus acreedores? apunta en esa dirección.Aquí, lo primero a considerar son los antecedentes. Doe Run es una firma privada que asume la propiedad de un complejo minero-industrial que incluye una refinería en el área de La Oroya. Un complejo que por décadas fue administrado por la burocracia dorada peruana y que, conviene recordar, nos costó cientos de millones de dólares en pérdidas financieras, un abultado pasivo ambiental y la virtual descapitalización de una empresa estatizada en los aciagos días de la dictadura velasquista. Todo esto se tapó con la privatización? y en ello se tuvo relativo éxito. Quien la compró asumió como responsabilidades modernizar y recapitalizar el complejo minero, asumir como propios los escandalosos pasivos ambientales de la empresa estatal que la regentó previamente (Centromín Perú), así como adecuarse a las reglas ambientales, laborales, tributarias y de cualquier otro plano vigentes en el proceso de privatización. Aunque ahora tengan otro tono, Doe Run aceptó estos compromisos. Tal vez ?diría un malpensado? aconsejado equivocadamente por sus asesores respecto a la maleabilidad de las reglas peruanas en el tiempo.Lo concreto aquí es que Doe Run, el 1 de setiembre de 1998, se hizo de Centromín y de todo lo registrado en los acuerdos.Para los fines de estas líneas, resulta irrelevante cuánta plata hizo esa empresa privada en este tiempo, o si sus resultados fueron o no sensibles a la evolución de la economía global. Lo importante es si cumplió o no con los...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR