La captura de la realidad.

CargoCULTURA

Realidad y objetividad son palabras que provocan recelo. Se cree, por ejemplo, que el documental persigue ese objetivo; en todo caso, está a la caza de la realidad porque no evade, no fuga a paraísos artificiales. Objetividad y neutralidad. Se ignora quizá que la sala de montaje es el lugar donde se editan las imágenes y se crea una realidad distinta, más subjetiva, de autor. El diálogo intertextual, prescindiendo de la realidad, es una modalidad renovada del conocimiento. En fin, el auge de los documentales en estos momentos en el mundo --el cine de lo real-y recientemente en el Perú, respondería, también, a esa necesidad y apego a lo que ha sucedido.

En el Perú han ocurrido muchas cosas importantes en los últimos veinte años: Sendero, la violencia interna, el desorientado gobierno de García, el de la corrupción sistémica de Fujimori, la marcha de los Cuatro Suyos, punto final del proceso para recobrar la democracia, el tormentoso...

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