Arquitectura de decisiones
| Autor | Cass R. Sunstein - Richard H. Thaler - John P. Balz |
| Cargo | Abogado Magna cum laude por Harvard Law School - Robert P. Gwinn Professor of Behavioral Science and Economics - Estudiante de PhD en el Departamento de Ciencias Políticas de University of Chicago |
| Páginas | 386-401 |
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Piense en el siguiente ejemplo hip otético:
La directora de los ser vicios alimentarios en las escue las de una ciudad
lleva a cabo una serie de experim entos que manipulan la forma en que
se colocan los alime ntos de las cafeterías. Con poca sorpr esa, descubre
que los niños eligen depend iendo del orden en que aquell os estén
tendrán mayores probabilidades de s er consumidos que los del medio;
ocurriendo lo mismo c on los que se encuentren más a la vista, frente a
la que ocupen un lugar no tan vis ible. La pregunta es: ¿qué uso debería
dar la directora a sus recientes d escubrimientos?
A continuación, unas cuant as opciones a considerar:
a) Colocar los alimentos en la forma que resulte de m ejor provecho
para los estudiantes, considerando todos los aspectos.
b) Elegir e l orden aleatoriamente.
lo que hubieran decidido po r sí mismos.
d) Maximizar las ventas de los productos de aquellos distribuidores que
ofrezcan mayores sobornos.
(*) Abogado Magna cum laude por Harvard Law School. Felix Frankfurter Professor of Law en la misma casa de estudios.
Información y Asuntos Regulatorios (OIRA) del Gobierno de Estados Unidos.
(**) Robert P. Gwinn Professor of Behavioral Science and Economics, y Director de the Center for Decision Research, Graduate
School of Business, University of Chicago. Miembro honorario de American Academy of Arts and Sciences.Research Associate
de National Bureau of Economic Research.
(***) Al momento de escribir el artículo, el autor era estudiante de PhD en el Departamento de Ciencias Políticas de University of
Chicago.
(****) Título original: THALER, Richard, Cass SUNSTEIN y John BALZ. Choice Architecture. Social Science Research Network.
Disponible en web: http://ssrn.com/abstract=1583509, 2 de abril de 2010.
Traducción, autorizada expresamente por los autores, de Bruno Doig Gonzales Otoya, alumno de la Facultad de Derecho
(*****) Este ensayo utiliza en gran medida las ideas de THALER, Richard y Cass SUNSTEIN. Nudge: improving decisions about
health, wealth and happiness. New York: Penguin Books, 2009; otros materiales del blog del libro, disponible en web en
www.nudges.org.Editadopor John Balz.Este texto fue escrito antes de que Cass Sunstein se uniera a la administración de
Cass R. Sunstein(*),
Richard H. Thaler(**) y John P. Balz(***)
Arquitectura de decisiones(****)(*****)
Nuevas Perspectivas
Arquitectura de decisiones
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e) Ma ximizar las utilidades del periodo.
La opción a) tiene un atractivo obvio. Pued e haber cierta
controversia, pero poco s discutirán la premisa de que los niños
obtendrían mayores provechos comie ndo frutas y vegetales,
que comiendo hamburguesas, frituras y dulces. Sí, esta opción
puede parecer algo intrusiva, incluso paternalista; sin embargo,
¡las alternativas son peores!
La opción b) podría ser considerad a justa y de principios y,
en cierto sentido, neut ral. Sin embargo, desde la perspectiva
de una administradora pragmát ica, ¿tiene sentido coloc ar
las verduras de la ensalada en distintos lu gares de la línea o
separar las hamburguesas del pa n? Además, si el orden es
aleatorio en las distintas es cuelas; entonces los estudiantes de
algunas tendrán dietas menos s aludables que los estudiantes
de otras. ¿Es esto deseable?
La opción c) puede parecer un hon orable intento de evitar
la intervención: tratar de im itar lo que los niños hubier an
elegido por sí mismos. Quiz ás esta deba considera rse la
decisión objetivamente neutr al y quizás la directora deba
seguir de manera neutral los des eos de la gente (por lo
menos en el caso de los estudi antes mayores). No obstante,
un simple razonamiento revela que est a es una opción difícil
de implementar. Los experimentos prueban
que los niños eligen dependiendo del orden en
que los productos están colocados. Entonces,
¿cuáles son las verdaderas preferencias de l os
para determinar lo que los estudi antes
hubieran elegido por su cuenta? En una
cafetería es imposible evitar or ganizar los
alimentos.
La opción d) podría ser atracti va para una
administradora corrupta y, pues, manipular el
orden de los comestibl es podría ser una nueva
arma en su arsenal de métodos di sponibles
para explotar su poder. Sin embargo, si la
directora es honorable y honesta, esto no será
nada atractivo.
La opción e), al igual que las opciones b)
y c), tiene cierto atractivo, espec ialmente
para los economistas entrenados o para
las directoras de ser vicios alimentario s que
reciban incentivos en tal sentido. Sin embargo,
la administración escolar debe balancear
entre un rango de priorid ades y requisitos.
¿Es deseable que las cafeterías actúen c omo
centros rentables, si el re sultado son niños
poco saludables?
En este ejemplo, la directora es lo que
denominamos un arquitecto de decisio nes.
Un arquitecto de decisione s tiene la
responsabilidad de organiz ar el contexto en
que las personas eligen y toman decisiones.
A pesar de que este ejemplo es un fr agmento
de nuestra imaginación, muchas personas
reales resultan ser arquitec tos de decisiones,
la mayoría sin darse cuenta. Los docto res
describiendo los pos ibles tratamientos a sus
pacientes, los gerentes de recu rsos humanos
creando y administrando procedimientos de
inscripción para pla nes de salud, la división de
marketing diseñando las estrategias de venta s,
los diseñadores de votaciones diseñando
dónde colocar los no mbres de los candidatos
en una página, los padres explicando las
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