El virus anda a sus anchas con tanto caos y aglomeración

Por hernán medrano marin

Caminar por las calles de Mesa Redonda y mantener el distanciamiento social es una misión imposible para cualquier transeúnte. En un recorrido por esta zona comercial, El Comercio comprobó que pese a los esfuerzos de la Policía Nacional y los serenos de la Municipalidad de Lima, los angostos pasajes lucen abarrotados de ambulantes, estibadores y gran cantidad de personas, cuya afluencia a este sitio ha aumentado en los últimos días debido a la campaña navideña y de fin de año. Todo este desorden, caos y demás ingredientes generan un coctel idóneo para la propagación del COVID-19.La mayor congestión ocurre en los jirones Ayacucho y Cusco, donde las personas avanzan como en procesión. A esto se suma que muchas personas no utilizan bien las mascarillas o simplemente no las llevan puestas. Es decir, los protocolos de bioseguridad no son respetados por todos, y quienes sí los cumplen de todas formas se ven afectados por las aglomeraciones.Esta situación se está empezando a vivir también en Gamarra y se teme que con el pasar de los días se replique en sitios como el Jirón de La Unión, centros comerciales, entre otros.El Ministerio de Salud (Minsa), a través del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC), emitió recientemente una alerta epidemiológica en la que da cuenta de un incremento significativo de casos de COVID-19 en ocho regiones del país, que ya están en un nivel de riesgo alto.De acuerdo con la alerta, al 21 de noviembre (en la semana epidemiológica 45) se observa un incremento del 19% de casos (6.291) en comparación con la semana 43 (5.811). Según el análisis elaborado por el CDC, existe una alta probabilidad de que aumente aún más el número de casos debido al desplazamiento de la población para participar en reuniones sociales por Navidad y fin de año. Por ello, instó a las autoridades competentes a promover el fortalecimiento de los servicios de salud y las actividades de vigilancia en los establecimientos sanitarios públicos y privados.Esta realidad se ha visto reflejada en la disponibilidad de camas hospitalarias. Essalud informó el último jueves que el 57% de camas del Centro de Atención y Aislamiento Temporal COVID-19 de la Villa Panamericana, en Villa El Salvador, se encuentran ocupadas por 1.138 personas. El médico Juan Oriundo, director de esta sede, informó que los contagios se incrementaron en pacientes de entre 31 y 64 años, que representan casi la mitad del total...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR