Salud, Mosquera

Por Manuel BarretoLo promocionaron como el duelo de estilos. De un lado, el toque pausado y paciente de Juan Aurich y, del otro, el ritmo intenso y dinámico de Sporting Cristal. El fútbol del pasado desafiando al fútbol del futuro. En medio, Roberto Mosquera, con el morbo añadido de su reciente paso por el club celeste. Ante tamaña cita, vistió a su equipo para la ocasión. Aurich fue potente y enérgico en el inicio del partido, y estableció una diferencia clara en el primer tiempo. En el segundo, cuando el cansancio genera espacios y obliga a pensar, recuperó brillantez y saboreó el resultado en cada toque. Gozó con cada pared como si fuera un gol. Ya sea en la disputa o en la posesión, el cuadro chiclayano siempre fue superior.Mosquera obtiene buenos resultados cuando se enfrenta a equipos precedidos de un alto ritmo de juego. En sus nueve enfrentamientos contra Jorge Sampaoli (ícono de la intensidad), mientras el argentino dirigía en el campeonato nacional, el técnico peruano ganó cuatro partidos, empató tres y perdió dos. Para Roberto, el juego no tiene por qué ser...

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