Las primeras nubes en el horizonte.
| Autor | Ball |
| Cargo | PODER Y SOCIEDAD |
[ILUSTRACIÓN OMITIR]
Apoco más de un mes de instalado el nuevo Gobierno, algunas de las incertidumbres y dudas que generó se han ido aclarando. La composición del nuevo gabinete y los discursos, tanto el del Presidente al asumir su mandato en el Congreso como el del Premier en su presentación en el mismo recinto, adelantaron algunas respuestas. Ni todas las que se esperaban, ni siempre satisfactorias, pero respuestas al fin y al cabo. Sin embargo, de acuerdo con las últimas encuestas, la población tiene una valoración favorable de la gestión presidencial y se muestra relativamente optimista sobre su futuro. Cierto que los estratos A y B son los más optimistas, pero no se puede desconocer que el cambio de gobierno ha aireado la vida política del país e incluso ha generado expectativas entre la población.
LA COMPOSICIÓN DEL GABINETE
El nombramiento de Jorge del Castillo como Primer Ministro supone jugar la mejor carta aprista posible desde el primer momento. Por la presencia y el liderazgo que tiene en la estructura del partido de Haya de la Torre, cuanto por sus visibles contactos y buenas relaciones con diversos y poderosos grupos económicos, el Premier asegura la orientación del primer gabinete y parece descartar la figura de un Presidente del Consejo de Ministros independiente y autónomo, afirmándose como el principal operador político del régimen.
El nuevo equipo ministerial confirma una tendencia que se observó desde la segunda vuelta electoral. La derecha, derrotada en los comicios, es hoy parte del gobierno y parece haber asegurado condiciones que le garantizan la continuidad del modelo. La conformación del gabinete muestra una decisión clara de establecer vínculos sólidos con las élites económicas. Los nuevos ministros de Economía, Comercio Exterior, Producción y Transportes garantizan esas relaciones.
La presencia de figuras de indudable prestigio democrático como Alan Wagner y José Antonio García Belaunde, no modifica esta tendencia, como tampoco lo hace la presencia de Juan Valdivia en el Ministerio de Energía y Minas, que, sin embargo, expresaría la búsqueda de cierta fuerza para la negociación con las grandes empresas mineras. La presencia de civiles en las carteras de Defensa e Interior es digna de elogio, más allá de las razonables dudas sobre las calificaciones de la ministra Mazzetti, exitosa ex ministra de Salud, en materia de seguridad ciudadana.
Con su presencia en los ministerios de la Mujer y el Desarrollo Social...
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