Presentación
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Presentación
Editorial
El período Enero 2008-Junio 2009 marca una etapa de cambio en la
conducción del Tribunal Constitucional, en el que se produce la renuncia
del suscrito a la Presidencia del Tribunal Constitucional, debido a la obs-
trucción de la nueva mayoría, que ingresó (2006 y 2008) con el gobierno
del Partido Aprista Peruano, a la gestión iniciada en la transición democrá-
tica con las presidencias de Javier Alva Orlandini y Víctor García Toma que
me antecedieron, con el propósito de asumir la dirección jurisprudencial y
el control presupuestal del TC.
En todo órgano colegiado las discrepancias internas jurisdicciona-
les o de gestión administrativa se resuelven por un principio democrático
de mayoría, decisiones que el Presidente del Tribunal Constitucional debe
representar, aun cuando sea minoría. Sin embargo, esas discrepancias ju-
risdiccionales y de manejo presupuestal se fueron embalsando y profun-
dizando por la naturaleza ideológica del conflicto. Caracterizado por un
lado, por el debilitamiento de la lucha contra la corrupción fujimorista
—Casos Wolfenson y Jailiie— y contra la impunidad de los delitos con-
tra los derechos humanos —Caso El Frontón— vinculado al gobierno de
turno, entre otros; y, por otro lado, se expresaron en el retiro de confianza
del personal directivo para asumir el manejo presupuestal, adquisiciones,
promociones y nombramientos de personal de su entorno.
De modo que, en aras de una ética de la convicción con los princi-
pios y valores democráticos y constitucionales con los que asumí el cargo
y una ética de la responsabilidad en el manejo de los recursos públicos, se
produjo mi renuncia irrevocable a la Presidencia, al no poder ser el repre-
sentante de esta nueva mayoría de magistrados del Tribunal Constitucional
que había tomado partido por un manejo reñido con la ética.
Como el Tribunal habla a través de sus sentencias, se puede decir
que con esta nueva mayoría se inicia una etapa en la que se han expedido
sentencias en las que se permite convalidar la prescripción contra los de-
litos de lessa humanidad (Caso El Frontón), obstaculizar la lucha contra
el lavado de activos proveniente del narcotráfico (Caso Abanto Veráste-
gui), minar la lucha contra la corrupción militar y judicial respectivamente
(Caso General Chacón y Casos Bringas, De Valdivia, Jauregui). Asimismo,
se ha permitido el no pago de impuestos a empresas como Transporte
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