La policía que queremos

Por Rolando Chumpitazi. Editor de LimaEl problema lo tenemos instalado. La inseguridad ciudadana es pan de cada día, nadie se siente seguro, y todos viven pensando en qué momento les tocará ser una víctima directa o colateral de la delincuencia.En estos últimos dos días, las bandas de marcas han seguido actuando. En Surco, el sábado; en Lince, el viernes. En solo dos acciones robaron más de S/.200 mil. Balas, miedo, temor. Nadie está seguro en las calles. A los delincuentes ya no les importa si es que sus potenciales víctimas van acompañadas de adultos mayores o niños. Nada les impide actuar y desatar balaceras con tal de conseguir su objetivo.Hay un 86% de peruanos que se siente inseguro cuando sale a las calles. Un tema de percepción, pues, no es. Menos mal que el ministro del Interior acaba de enmendar sus palabras, y, por fin, ante la evidencia real y fáctica de que el crimen es parte del ADN del país, ha dicho que sí, que la inseguridad no es una percepción sino una situación real que, además, le quita el sueño.Está bien que Wilfredo Pedraza no pueda dormir pensando en cómo solucionar este tema. Finalmente, él es el responsable político de la seguridad ciudadana. Él y muchos otros actores más, por cierto, como los propios policías, los alcaldes, los jueces, los fiscales y nosotros mismos tenemos que ver de una u otra forma con el tema.Ayudaríamos mucho los ciudadanos si dejamos de transportar grandes cantidades de dinero sin seguridad. Hay opciones bancarias y seguras para ello. Hágalo, y no solo se cuidará usted, sino que los delincuentes tendrán menos trabajo.Pero, más allá de soluciones reactivas, lo que...

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