Perú, el paraíso de la mujer

Por Juan Manuel Robles

Vivo en un país que valora mucho a la mujer, por eso cuida su imagen y refuerza las virtudes que la enaltecen. Santa Rosa de Lima nos dejó un legado insoslayable: la mujer buena sabe amar a Dios y ser virtuosa aunque eso implique sufrir. Tenemos un cardenal que entiende bien este patrimonio, y que lleva años alzando la voz para defender a la mujer peruana de posibles aberraciones, como el aborto terapéutico o el sexo con adolescentes en plena adolescencia. En mi país, el cardenal puede decir estas cosas en la emisora más importante, y así defender masivamente a la mujer.

La Policía Nacional de mi país cuida la integridad de la mujer. Si eres una chica y le dices a un oficial que te están gritando improperios, él te mirará, hará un inventario rápido de tu ?look? y de tu falda, y te recomendará gentilmente que no te vistas así, pues eso se presta a malentendidos. Gracias a sugerencias como esa, la institución policial previene muchísimas confusiones (y protege a la mujer de tocamientos indebidos). La mujer está en la esencia misma de la policía: su patrona es nada menos que Santa Rosa de Lima.

La televisión de mi país protege a la mujer: periódicamente, chicas que venden su cuerpo aparecen siendo desalojadas con violencia de algún antro, en ropa interior. Es una forma de enseñarles a las niñas el destino ruin de las mujeres malas. Hace años, una periodista escondió una filmadora en un...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR