Parquímetros: necesarios pero olvidados

Por carlos batalla

PeriodistaEn la década del 40 el uso de parquímetros no era algo urgente en la capital, pero en los dorados años 60 había aumentado de tal forma el parque automotor que esos aparatos se convirtieron en una necesidad.La capital necesitaba vías para que circularan más autos, pero también formas de controlar y ordenar el tránsito que cada día era más caótico.Luis Bedoya Reyes asumió el cargo de alcalde de Lima en enero de 1964. En agosto de ese año, precisamente, los tranvías dejaron de funcionar; y más tarde, desde 1966, latedral. Los primeros intentosEl marco legal que se estableció para Lima Metropolitana estaba amparado en una ordenanza publicada el 7 de mayo de 1969, que permitió a los municipios establecer un cobro por derecho de estacionamiento a tiempo medido en las vías públicas de carácter comercial. Lo mismo que ya se hacía en muchas ciudades del mundo. Los parquímetros, como los árboles, se plantaron en el Cercado de Lima y en San Isidro. Para reforzar esta medida y colaborar con el Plan de Desarrollo Metropolitano, la dictadura de Velasco Alvarado publicó el 25 de marzo de 1971 el Decreto Ley N° 18813, que dejó al municipio de Lima apto para establecer un gravamen de hasta el 20% sobre derechos de estacionamiento y guardianía de vehículos. El reglamento de esta ley debía hacerlo a sustraer las monedas de los parquímetros como los que estuvieron en el Mercado Central. El municipio buscó...

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