?No creo en la familia como el lugar del amor incondicional?

Por Katya Adaui

Al seguirles la pista a las publicaciones de Katya Adaui, nos situamos frente a una autora cuya obra se caracteriza por un uso del lenguaje tan cuidadoso como certero. En su más reciente publicación, ?Geografía de la oscuridad?, este lenguaje es puesto al servicio de un conjunto de historias que diseccionan las relaciones familiares de modos diversos: a veces con serrucho, a veces con bisturí. Este trabajo, el primero en ser publicado con la editorial española Páginas de Espuma, ha sido muy bien recibido en España, y hace pocos días llegó a las librerías limeñas.?Geografía de la oscuridad? supone la globalización de la narrativa de Adaui. El ser parte del catálogo de Páginas de Espuma la ubica junto a talentosas narradoras latinoamericanas como Mariana Enríquez, Samanta Schweblin, María Fernanda Ampuero o Mónica Ojeda.?En ?Geografía de la oscuridad? las relaciones familiares son duras, ásperas, dolorosas. Y no hay ninguna moraleja al respecto.No, porque la literatura con moraleja es fábula, no es cuento, y la escritura que a mí me interesa se hace preguntas sobre el estado del ser, sobre habitar, sobre la vida, no sobre lo moral o lo inmoral, sino sobre la vida siendo la vida misma. La moraleja murió con Madame Bovary. La literatura moderna mató al narrador que juzga. Yo pensaba en el concepto de padre, madre núcleo. La familia como la entidad más amorosa, la más importante, la que nos regala las primeras premisas de nuestras vidas. Esa zona de luz que se puede volver oscuridad también. Todo lo familiar se puede volver siniestro. Y lo siniestro se vuelve familiar también.?¿Estamos más acostumbrados a buscar monstruos en nuestras relaciones familiares que a valorar cosas más saludables?En este libro busco pensar ambas cosas y explorar las ambivalencias, las zonas de frontera, de ambigüedad que también tienen los seres que supuestamente más nos aman. No creo en la familia como el lugar del amor incondicional. También la familia puede ser el lugar del daño más absoluto. Lo que hago cuando escribo es no idealizar. Es ficción; por tanto, ninguna relación es sagrada. Ni Dios. Y la escritura tampoco está endiosada. Pienso en Jamaica Kincaid, que dice ?aunque tenga que mentir cuando escribo, trato de mentir lo más honestamente posible?. Lo suscribo.?Es interesante tu relación con el lenguaje: siempre eliges cuidadosamente tus palabras.Cuando escribo más que pensar en tramas pienso en conceptos y en lenguaje, entonces ahí es donde...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR