Miraflores: el pueblo bonito

Por Roxanne Cheesman. Historiadora económicaEn un libro con nostálgicas fotografías e ilustrados textos del profesor Héctor López Martínez, la Municipalidad de Miraflores recorre la historia del distrito, que comenzó hace 10 mil años con nómades llegados cada verano para cazar y pescar. Gracias al clima benigno se fueron formando aldeas con organización política y religiosa y, hacia el año 500 d.C., un centro en la huaca Pucllana. Los restos de sus constructores reposaban en un gran cementerio de la Bajada Balta, sede también de su aldea pesquera.Miraflores aparece en las primeras crónicas españolas. En 1534, dos frailes mercedarios recorrían las vecindades de Surco para evangelizar a sus pobladores. En retribución, Pizarro les entregó, junto con Surquillo y la Calera de la Merced, los terrenos que bautizaron como San Miguel de Miraflores; y en 1700, los sacerdotes de la orden entregaron una chacra llamada Miraflores a Juan Bautista Palacios y a su esposa, quienes fueron los primeros vecinos oficiales del lugar.Miraflores fue siempre descrito como un ?pueblo bonito? alrededor de su iglesia. Se llegaba saliendo de Lima por la portada de Juan Simón al final del actual Jirón de la Unión y recorriendo seis millas de un camino en el que acechaban bandoleros ocultos tras los muros de adobe de las chacras. Habitado largo tiempo por indios y castas, su buen clima lo convirtió en lugar de convalecencia para los enfermos y luego, a fines del siglo XVIII, comenzaron a construirse ranchos y casas de veraneo. En una de ellas, no identificada, se reunieron en setiembre de 1820 los representantes de San Martín y el virrey Pezuela para buscar, sin éxito, una salida pacífica a la guerra de la independencia.En el siglo XIX los viajeros mencionan a...

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