"Los líos profundos"

AutorJosé Carlos Requena
CargoAnalista político

Mientras connotados voceros del oficialismo, en el Ejecutivo y el Legislativo, se enredan con declaraciones que los confirman a ellos mismos como sus propios peores enemigos, el país transita en una tensa calma. Cuando las portadas de los diarios eran pobladas por dimes y diretes entre altos funcionarios de las gestiones de Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski, espacios menos notorios eran ocupados por la preocupante reactivación de los principales conflictos sociales de los últimos años. El proceso electoral no ha sido más que un obligado receso.

El lunes 22, El Comercio publicaba la creciente incomodidad de los comuneros de la zona de influencia del proyecto minero Las Bambas (Apurímac). Según los comuneros, el paso de inmensos camiones transportando minerales no fue parte del acuerdo con la minera, que incluía –más bien– el paso de maquinaria y operarios. El mismo día, “La República” reportaba la intranquilidad en los habitantes de la zona por la diferencia en la cotización de tierras, indisposición a abandonar las comunidades, e incomodidad por el ruido y los impactos ocasionados por las operaciones de la empresa, cada vez más intensas.

El miércoles 24, fue aprobado en el Congreso un proyecto conjunto del Ejecutivo y la mayoría parlamentaria opositora, que alarga la agonía del Complejo Metalúrgico de La Oroya (Junín). El aparente consenso (108 a favor, 0 en contra, 5 abstenciones) oculta solo temporalmente el gran malestar que se activará cuando las expectativas se encuentren con la inviabilidad económica...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR