Iraq: el factor Muqtada al-Sadr.
| Autor | C |
| Cargo | INTERNACIONAL |
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En febrero del año 2008, el líder chiita iraquí Muqtada al-Sadr declaró que extendería unilateralmente, por otros seis meses, el cese al fuego que contuvo la ola de violencia en aquel país. La decisión fue bien recibida por el gobierno estadounidense, que de inmediato lo invitó al diálogo. Pero la mesura no duró demasiado y en las primeras semanas de marzo al-Sadr llamó a la desobediencia civil con el argumento de que el actual primer ministro iraquí, Nouri al-Malki, quería desarmar a las milicias chiitas que operan en Basora, la segunda mayor ciudad de Iraq. Además, convocó a una manifestación multitudinaria en contra de la ocupación estadounidense, a la cual se espera la asistencia de más de un millón de personas. En este contexto tan convulsionado, la figura de al-Sadr emerge como un elemento clave para entender el presente y futuro de Iraq. Este artículo reflexiona sobre el surgimiento, desarrollo y contradicciones que perfilan la figura de Muqtada al-Sadr, el hombre más influyente del Iraq contemporáneo.
IRAK DESPUÉS DEL RÉGIMEN DE SADDAM HUSSEIN
Con la invasión de Estados Unidos en el año 2003 y el posterior colapso del régimen de Saddam Hussein, las fracturas étnicas y religiosas de la sociedad iraquí, contenidas durante la dictadura de casi veinticinco años, emergieron de una manera brutal. Los chiitas, marginados durante el régimen baazista de Hussein, reclamaban poder político en proporción a su importancia demográfica: representan el 60% de la población iraquí.
El chiismo no es un ente monolítico; al contrario, su visión en muchos aspectos es heterogénea. Muchas fracciones difieren en temas transcendentales como el rol de la religión en la política. Unos son más propensos a posturas radicales y a la influencia de autoridades extranjeras, de Irán principalmente. Llama la atención la falta de un liderazgo claro dentro del chiismo. El mando está excesivamente fragmentado.
Según el International Crisis Group (ICG), el chiismo iraquí está influenciado por cinco factores fundamentales:
(i) Fuertes vínculos comunitarios. Tras años de persecución durante el régimen de Saddam Hussein, los chiitas desarrollaron un importante sentido de solidaridad común. Luego el colapso de la dictadura, los símbolos chiitas aparecieron después de mucho tiempo en lugares públicos, como un fuerte signo de identidad.
(ii) Firme activismo religioso chiita. Después del derrumbamiento del gobierno baazista, el vacío de poder propició que...
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