Haga algo, ahora sí, señora Villarán

Por Pedro Ortiz Bisso. Periodista#HagaalgoseñoraVillarán es un hashtag bastante divertido y juguetón que se puso de moda en las redes sociales durante los primeros meses de Susana Villarán en el Palacio Municipal. El buen humor de quienes creían injusto exigirle resolver los problemas de Lima en un dos por tres hizo que esta etiqueta se convirtiera en un bumerán para los críticos de la lideresa de Fuerza Social. No olvidemos que los ataques empezaron prácticamente desde que se sentó por primera vez en el sillón de Nicolás de Ribera el Viejo.A pocas semanas de cumplir tres años en el cargo, pareciera que la señora Villarán considera que ese período de gracia es eterno o, por lo menos, no ha concluido. Y en lugar de enfrentar los problemas frontalmente, opta por defenderse como el más tradicional de nuestros políticos: atacando al mensajero y culpando de sus errores a su antecesor. El Comercio denunció el pasado lunes que las estaciones del Metropolitano carecían de certificados de seguridad y que los patios de maniobras en Comas y Chorrillos no tenían licencia de funcionamiento. Además, se dio cuenta de aquello que cualquiera de los miles de usuarios del servicio puede constatar todos los días: el pronunciado deterioro de los terminales. En algunos de ellos, los extintores han desaparecido, están pobremente señalizados y las cajas de electricidad, como se detectó en la estación Javier Prado, están abiertas.La respuesta de la señora Villarán y Pro Transporte ha sido destemplada y agresiva. Pese a las evidencias, acusaron a este Diario de mentiroso. No obstante, culparon a la gestión Castañeda de los problemas denunciados.Detengámonos...

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