La guerra en el corazón del Vraem

Por Coronel PNPÓscar ArriolaJefe de investigación regional de la Dircote

El inicio de la erradicación de hoja de coca en los caseríos de Mazamari (Junín) ha encarnizado la lucha de los gremios asentados en esa parte de la selva central que da acceso al Vraem. Estos primeros días de conflicto entre cocaleros y policías han dejado 15 heridos, pero también habrían sido aprovechados por el terrorismo para evidenciar su presencia.Días atrás algunas zonas de Mazamari amanecieron con pintas alusivas (la hoz y el martillo) a Sendero Luminoso. La policía descarta que los autores fueran terroristas, y atribuye el hecho a delincuentes que buscan sembrar pánico en medio de las protestas. Sin embargo, en su informe anual sobre terrorismo en el mundo, el Departamento de Estado de los Estados Unidos remarcó que Sendero Luminoso, es una amenaza vigente en la zona.A casi siete horas de Mazamari está Pichari (Cusco), el centro logístico de las fuerzas del orden en el Vraem y punto de entrada al sector más convulso de este valle: el distrito de Vizcatán del Ene. En Pichari, la atención policial y militar está enfocada en el despliegue terrorista a lo largo de Vizcatán del Ene (Junín). El coronel PNP Óscar Arriola, jefe de la División de Investigación de Terrorismo Regional de la Dircote, traza un primer panorama así: ?Las huestes de Sendero están en Vizcatán del Ene pero viven encapsuladas, tienen dificultad para expandirse?.A partir de información vertida por exterroristas que ahora cooperan con la policía, el oficial sostiene que a lo largo de todo el Vraem operan 440 integrantes de Sendero Luminoso. Vizcatán del Ene, como núcleo de la subversión, alberga a la fuerza senderista principal, es decir, 30 terroristas dirigidos por el cabecilla Víctor Quispe Palomino, alias ?José?, y a ocho columnas itinerantes de 12 miembros.?Bajo amenaza ?Arriola explica que Sendero ya no convence al campesinado con su ideología y por eso ha centrado su accionar en una zona de difícil acceso como Vizcatán del Ene. Ahí, las columnas irrumpen en los pueblos, asesinan o expulsan comuneros contrarios a su orden, y entregan las tierras de los desplazados a quienes aceptan ser sus colaboradores. Este ha sido el caso de Valle Hermoso, Valle Manantial, Alto Mantaro y Unión Fortaleza, de donde 60 familias huyeron tras la muerte de al menos nueve dirigentes.El alcalde de Vizcatán del Ene, Alex Atao, dijo que se trata de problemas internos dentro de cada centro poblado y que su municipio...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR