Una revolución de la evidencia

Hace un tiempo, el colegio de mi hija explicó a los padres que estaban reorganizando las clases de lectoescritura para pasar a formar grupos con diferentes habilidades. Mi esposa hizo una pregunta simple: "¿Cuál es la evidencia para haber tomado esa decisión?”. El resultado fue una total falta de comprensión. ¿Evidencia?

Hace solo un par de generaciones, la mayoría de los médicos tenían una actitud similar hacia la práctica basada en la evidencia. Se pensaba que los sofisticados procedimientos estadísticos no podían igualarse con la experiencia, especialmente porque cada caso es único. Los ensayos aleatorios estaban muy bien para la teoría, pero en la práctica no eran éticos. Hoy ese escepticismo se ha transformado por completo en la medicina: la evidencia triunfa sobre los años de experiencia, mientras que el juicio personal se ve reforzado por bibliotecas en línea llenas de cuidadosos análisis.

Los profesores han permitido que se les deje atrás en cuanto a la revolución de la evidencia. Siento compasión por la profesión que está siendo constantemente cuestionada a posteriori por los padres y los inspectores escolares. Los docentes se han acostumbrado a recibir una novedad tras otra desde el Ministerio de Educación.

Sin embargo, estoy de acuerdo con Ben Goldacre –epidemiólogo y autor de una excelente polémica sobre la educación basada en la evidencia encargada por el propio Ministerio de Educación del Reino Unido (DfE, por sus siglas en inglés)– cuando sostiene que si la profesión docente adoptara el enfoque basado en la evidencia, aumentaría en lugar de disminuir su independencia del gobierno. Después de todo, los hechos pocas veces encajan perfectamente en ideologías políticas. En una cena reciente organizada por el Wellcome Trust, el organismo educativo británico –con solo un profesor presente, por desgracia– se discutió el tema. La larga tensión entre los profesores y los gobiernos fue claramente reconocida como un obstáculo, pero es algo que puede ser evitado si los propios docentes se hacen cargo de la agenda sobre la evidencia.

Esto es mucho más que simplemente realizar ensayos aleatorios para comparar diferentes enfoques de enseñanza. Se debe tomar en consideración la situación en la práctica clínica, como señala el profesor Jonathan Shepherd, quien sostiene que el secreto es una estricta secuencia de investigación, práctica y educación continua. Los médicos en formación reciben instrucción por parte de los médicos...

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