Europa al borde del abismo

Por Juan Velit Granda. Internacionalista

Cuando hace algunos meses escribimos la columna ?La extraña levedad del euro?, en la que resaltábamos el difícil trance por el que transitaba la moneda referencial europea, algunos críticos consideraron que nuestra posición extrema y exagerada no revelaba la realidad económica del Viejo Continente.

Pero el tiempo, desgraciadamente, nos ha dado la razón. El euro se debate en una de sus más serias crisis y las posibilidades de que continúe como moneda rectora de las finanzas europeas están en serio cuestionamiento.

No es exagerado considerar que en la actualidad algunas naciones podrían estar arrepintiéndose de su adopción, y las que se negaron, a pesar de las fuertes presiones, deben estar felicitándose por su acertada decisión.

El caso de Grecia es especialmente grave. Desgraciadamente a la nación helénica no le queda otra alternativa que suspender los pagos de sus compromisos, evadirse del euro y decidirse por una devaluación traumática, que tendrá sus repercusiones no solo en este país sino en toda la Eurozona.

Pero el caso griego no es sino otra señal de las muchas que anunciaban, desde hace algún tiempo, la crisis que vive Europa. El temor ha invadido la Eurozona: el peligro de epidemia, más que alertarlos, parece que ha inmovilizado a los europeos y el terror de que sus presupuestos sean infectados los ha puesto al borde de un ataque de nervios.

Algunos países, sin embargo, habían tomado sus precauciones y se habían vacunado contra la epidemia, como Alemania, donde la canciller Angela Merkel se ha preparado en la eventualidad de que Atenas suspenda el pago de su deuda. Apoyarían al sector financiero alemán y con ello menguarían las pérdidas.

El ministro de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schäudle, ha hecho un llamado a los...

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