?Estrellas del rock? de la ciencia

Por tomás ungerLa ciencia en general, y la física en especial, ha tenido dos ?estrellas de rock?: Albert Einstein y Stephen Hawking. El primero murió el año que Elvis Presley hizo su primera grabación. Alcanzó el estrellato antes que la televisión y antes de la radio comercial. Su contribución a la física está a la par con Arquímedes, Galileo, Newton y Maxwell. Planteó cuatro teorías que fueron comprobadas experimentalmente y se convirtieron en leyes de la física. En 1905 postuló la teoría del movimiento browniano, el efecto fotoeléctrico, la relación masa-energía y la teoría especial de la relatividad. En 1915 planteó la teoría de la relatividad general, comprobada en 1919. Dos años más tarde le dieron el Premio Nobel de Física por el efecto fotoeléctrico, y esto se debió a que ?según las malas lenguas? la Academia Sueca no entendía la teoría de la relatividad. Einstein llegó a ser un símbolo del avance científico mucho antes de que llegaran la televisión, el rock y la cultura de las celebridades. Fue popular y sus fotos sacando la lengua y riéndose dieron la vuelta al mundo. Conocido aun entre gente que no le interesaba la ciencia, se convirtió en una fuente de citas. Una de sus frases más celebres fue la que dijo cuando le preguntaron sobre las dimensiones del universo: ?Hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana. Sobre lo primero no estoy seguro?.?Hawking?El británico Stephen Hawking fue uno de los grandes físicos de los siglos XX y XXI, junto con Dirac, Feynman, Planck, Bohr, entre otros, sin llegar al nivel que estos alcanzaron. Sin embargo, Hawking vivió en la época de las estrellas de rock, la TV, Facebook y el culto a las celebridades. Tuvo la trágica suerte de contraer esclerosis lateral amiotrófica (ELA), que paraliza hasta causar la muerte y para la cual no hay cura. Eso fue lo que gradualmente anuló su capacidad física hasta dejarlo limitado a mover solamente el músculo de su pómulo y los ojos. Sin embargo, sin medir gastos ni esfuerzos, una serie de científicos y técnicos se la ingeniaron para permitirle seguir produciendo, comunicando sus ideas y dictando conferencias. Cuando perdió la voz, la reconstruyeron con un sintetizador y programaron una computadora con palabras y frases que él usaba con frecuencia, facilitando la preparación de sus textos. En total 3.000 palabras y frases fueron integradas en los años 80 y 90. Podía producir hasta 15 palabras por minuto. Pero su enfermedad fue progresando y fue...

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