Un congresista se balanceaba?

Por Alfredo Bullard. Abogado

?sobre la tela de una araña, como veía que resistía fue a llamar a un congresista más. Y así sigue el canto hasta que hay tantos congresistas que la tela de araña no aguanta su peso y todos caen por los suelos.

La economía se parece a una tela de araña. Está formada por una infinidad de hilos, frágiles y vulnerables a la presión. Esos hilos son millones de decisiones individuales, de empresas y consumidores. Desde la compra de un caramelo hasta la contratación de un trabajador, pasando por la inversión en obras de infraestructura o en el uso de recursos naturales, son pequeñas fracciones de un todo. La capacidad de la red de resistir es el resultado de la sumatoria de todos estos hilos. Pero nunca se debe olvidar que, a pesar de la aparente fortaleza, la tela de araña económica es en realidad fragilidad organizada por la interacción. Con un aparente origen caótico, la tela de araña adquiere a través de los intercambios económicos simetría, estabilidad y belleza.

Las épocas de vacas gordas, en las que la economía crece, generan la falsa impresión que la economía puede aguantar cualquier peso. A ese peso lo llamamos regulación.

Cada regulación añade algo de peso a la capacidad de la tela de araña económica de soportarla. La solidez de la economía genera la sensación de que nos podemos seguir colgando. Y entonces cada congresista (u organismo como Indecopi, Osiptel, Ositrán, Osinergmin o un ministerio) no ve el costo que genera, pero sí ve el dividendo político que obtiene. Ninguna medida, por sí sola, se tumba al país. Pero cada una se va sumando a la anterior, y la anterior a la que le precedió.

Entonces creamos códigos de consumo, declaramos la moratoria de nuevas universidades, legalizamos el perro muerto creando el derecho de los estudiantes a no pagar sus pensiones, queremos prohibir la comida chatarra, subimos el sueldo mínimo, queremos controlar las fusiones empresariales, damos una ley de seguros que es un verdadero adefesio económico, obligamos a editar libros reutilizables, queremos...

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