Arde la tierra caliente: El nuevo dolor de cabeza de Peña Nieto

Por Santiago Torrado. Desde Ciudad de MéxicoAl gobierno del presidente mexicano Enrique Peña Nieto, que tanto esmero había puesto en restarle peso al tema de la violencia ligada al narcotráfico en el discurso oficial, le estalló hace unos días el conflicto en el anárquico estado de Michoacán. Una semana después de impactantes imágenes de lo que, para todos sus efectos, luce como un frente de batalla, los grupos de civiles armados, lanzados en una feroz ofensiva para erradicar al cártel de Los Caballeros Templarios, continúan aferrados a sus armas.?No es solo un problema de inseguridad, ya es un problema de gobernabilidad. Michoacán es una amenaza a la seguridad nacional, a la gobernabilidad. Es un desafío abierto a la capacidad del Estado Mexicano de ejercer control sobre su territorio?, dijo a El Comercio Jorge Chabat, reconocido experto en narcotráfico y seguridad. Es la primera gran prueba en ese campo para Peña Nieto, concentrado hasta hoy en las grandes reformas económicas, en un giro que pretendía dejar en segundo plano la guerra contra el ?narco? que consumió el mandato de su predecesor, Felipe Calderón.Las llamadas autodefensas ya controlan un tercio del estado, en la región conocida como Tierra Caliente. El Gobierno Federal envió el lunes al Ejército y a la policía para restaurar el orden, luego de días de violencia, en medio del avance de las autodefensas hacia Apatzingán, considerado el gran bastión de Los Caballeros Templarios.Pero las autoridades se ven obligadas a mantener un delicado equilibrio para no chocar de frente con las autodefensas, que dicen haberse rebelado ante las extorsiones del cártel y que, de momento, tendrían el apoyo de la población.En una muestra de lo enraizado del problema, Los Caballeros Templarios intentaron reafirmar su autoridad el miércoles en Apatzingán. Mandaron cerrar todos los negocios y redujeron a cenizas una farmacia por no cumplir la orden, a pocas cuadras del lugar donde la policía federal había desfilado el día anterior para exhibir su fuerza.A eso se suma un confuso choque entre soldados y las autodefensas en el que, al menos, murieron dos civiles.A lo largo de un conflicto que ya ha cumplido un año, los mensajes del Gobierno Federal han oscilado entre la condena y el apoyo de facto a las autodefensas. En un primer momento desdeñó los enfrentamientos como una guerra entre cárteles. En mayo del año pasado envió tropas y más adelante, cuando aparentemente las autodefensas ganaban terreno y...

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