¿El ajedrez con trampa de Otárola?

Por Juan Paredes Castro

Todos deben haberlo notado: las únicas personalidades que suelen decir y reiterar que el tema de la reforma constitucional no está en agenda son el presidente Ollanta Humala y su jefe de Gabinete, Salomón Lerner.

Puede momentáneamente advertirse el peso que ambos tienen a la hora de fijar esa posición. Desde que lo hacen evidente, voces como la de Javier Diez Canseco y Marisol Espinoza han dejado de predicar lo contrario.

Humala y Lerner son conscientes de que pretender cambiar las reglas de juego políticas en un Perú no solo en crecimiento económico (al que hay que sacarle el mejor provecho en lugar de esquilmarlo) sino en un contexto de sacudones financieros internacionales, puede convertirnos en víctimas potenciales de coletazos recesivos sorprendentes.

A quien parece no importarle un pepino el crecimiento económico (y eso que sin él no hay inclusión social posible) es a un sector radical del humalismo, que por supuesto prefiere los compromisos estatistas y populistas de la primera vuelta electoral que los documentos y juramentos del hoy presidente de la República, que lo que menos quiere es fracasar en su gestión.

La jugada de ajedrez que ha puesto sobre el tablero el parlamentario humalista Fredy Otárola buscaría precisamente abrir un grave flanco en la Constitución vigente, en una...

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