¿Por qué los africanos son los reyes del atletismo?

Por Tomás Unger. Divulgador científico

Las Olimpiadas modernas incluyen una gran variedad de competencias, como el bádminton o el ciclismo, que los griegos nunca imaginaron. Pero las pruebas atléticas siguen siendo las mismas y entre ellas destacan las carreras.

Directamente ligados a las carreras están el salto largo y el salto triple, que se basan en la velocidad. En el campo de la velocidad, y el de la política, los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936 marcaron un hito. Jesse Owens, un negro americano, para gran disgusto de Hitler, estableció marcas asombrosas de velocidad y distancia.

De Owens a BoltHace poco describimos aquí la relación del cuerpo y las características que determinan el rendimiento de la máquina humana y cómo la capacidad de usar oxígeno determina su eficiencia en el consumo de combustible. Hoy trataré de explicar por qué los atletas africanos, o de ascendencia africana, acaparan medallas en las carreras olímpicas.

Setenta años después de Owens, Usain Bolt estableció un nuevo record en los 100 m. Desde hace 60 años los africanos occidentales de Kenia, de Etiopía y sus descendientes comenzaron a acaparar los records en carreras de largo aliento. Hoy, los kenianos y etíopes ostentan récords en la mayoría de estas pruebas, la maratón y la media maratón. Las mujeres de Kenia y Etiopía tienen la mitad de los mejores tiempos en la maratón y varios récords mundiales en las carreras de 20.000, 25.000 y 30.000 metros.

En las competencias de corta distancia, los mejores tiempos en la prueba máxima de velocidad, 100 m planos, los tienen los africanos occidentales o sus descendientes directos de otros continentes. En los Juegos de Londres se ha mantenido esta supremacía africana. Los científicos tratan de averiguar a qué se debe.

MusculaturaLos músculos solo pueden rendir proporcionalmente al oxígeno que reciben y a las enzimas que activan la química metabólica. Pero los músculos constan de fibras, y las fibras tienen vasos capilares (los vasos sanguíneos más delgados) que les llevan la sangre y con ella el oxígeno. Cuanto más capilares tienen, llega más oxígeno y es más eficiente el músculo. Por eso, el entrenamiento ?de fuerza?, que aumenta el tamaño de la fibra, pero no su número, es contraproducente para el rendimiento.

A menos que se trate de un esfuerzo muy breve, un ejercicio anaeróbico, que no requiere de aire, como levantar pesas, lo que cuenta es el número de fibras y su capacidad de recibir y aprovechar el oxígeno. Razón...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR