Normas internacionales promueven la narcotizacion de la economia peruana.

AutorGuti
CargoVRAE, SENDERO Y NARCOTR

[ILUSTRACIÓN OMITIR]

¿Los políticos y los expertos de la seguridad reflexionan sobre el impacto que tienen las políticas económicas en el comercio ilegal de la droga? ¿Se han preguntado si el modelo económico introducido estos años ha minado la llamada guerra contra las drogas?

En estas épocas de megainvestigaciones por lavado de dinero a empresarios emergentes o por el financiamiento de campañas políticas con dinero sucio, pocos especialistas han centrado su atención en cómo las reformas económicas moldean las actividades ilícitas conexas al comercio ilegal de la cocaína. Quizá se deba a que las reformas de mercado son percibidas solo como un problema de política económica, mientras que los mercados prohibidos como el de la droga son vistos como un asunto de políticas represivas.

Sin darnos cuenta, la puesta en práctica de normas globales, recomendadas por un conjunto de instituciones internacionales a inicios de los años noventa para liberalizar la economía peruana, ha tenido un efecto silencio no deseado en el tráfico ilegal de la droga, pues termina facilitando su desarrollo, convirtiéndose en un verdadero obstáculo para las políticas antidrogas que el Estado ejecuta dentro de un régimen internacional prohibicionista.

REFORMAS DE MERCADO Y MERCADO PROHIBIDOS

El Perú se mantiene fiel a una política prohibicionista global que promociona la eliminación de un mercado de la droga desde hace cinco décadas. (1) Como casi todos los países, el Perú ratificó la Convención Única de Estupefacientes de Viena en 1961, y otra mayoría de países ha firmado en 1971 la Convención sobre Substancias Psicotrópicas. En 1988 se adoptó la Convención de las Naciones Unidas contra el Tráfico Ilícito de Estupefacientes y Sustancias Psicotrópicas, que obliga a los países firmantes a criminalizar la producción, venta, transporte y cultivo de narcóticos y sustancias psicotrópicas, incluyendo los beneficios de las actividades ligadas a la droga.

El Estado peruano sigue al pie de la letra las indicaciones de organismos creados en el seno de las Naciones Unidas como la Comisión de Estupefacientes (CE), la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) y el Programa de las Naciones Unidas para la Fiscalización Internacional de Drogas (PNUFID), los cuales controlan la aplicación efectiva de normas y apoyan a su vez a las agencias nacionales antidrogas y las ONG que actúan en este campo y que comparten el enfoque prohibicionista. (2)

Otras instituciones multilaterales contribuyen al logro de los objetivos establecidos en las convenciones internacionales, cada una...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR