2021, ¿Es posible desconectarse del trabajo?
| Autor | Alejandra Saavedra |
| Cargo | Coach PNL y Terapeuta Holística |
| Páginas | 7-7 |
2021, ¿Es posible desconectarse del trabajo?
Industria Legal
Cada vez resulta más difícil marcar el límite
entre trabajo y vida personal. Pre pandemia,
los pendientes “urgentes” de trabajo habían
logrado colarse en los paseos familiares. En
el 2020, entre la cuarentena, el toque de
queda y el home office, se asumió que todos
estaban disponibles 24/7 y esta línea se
terminó de desmarcar.
Del otro lado, para aquellos que conviven
con una pareja, hijos, padres o roommates,
también se desdibujó esta línea. Los
espacios de trabajo y estudio se volvieron
compartidos, las responsabilidades en casa
incrementaron y los roles se duplicaron.
Ejemplo de ello son los ahora papás
profesores.
Hoy en día toca gestionar ambos mundos en
simultáneo. ¿Qué hacer? Te doy 3 ideas que
pueden ayudar:
1. Diseña tu horario y compártelo.
Coloca todas tus actividades: desde la
hora de despertar hasta la de ir a dormir.
Generalmente agendamos las reuniones más
importantes y asumimos que el resto del
tiempo alcanzará para cumplir con los
pendientes, atender reuniones imprevistas,
necesidades de la casa y ver una serie antes
de dormir. Sin embargo, difícilmente
encontramos el tiempo para aquello que no
colocamos en la agenda. Así es, incluso si
deseas ver una serie o hacer una llamada, lo
mejor es ponerlo en tu agenda. Si ves ese
horario ocupado, no planificarás una actividad
simultánea.
No basta con que solo tu conozcas tu
horario. Si convives con gente, será útil para
ellos saber cuándo no debes ser interrumpido
y en qué momento compartirás con ellos.
Igualmente, con el trabajo, si conocen tu
horario sabrán a qué hora no es apropiado
llamar, desde qué hora estás disponible y…
¡A qué hora ya no lo estás!
2. Planifica tus fechas de entrega, de
forma realista.
El trabajo nunca acaba. Así que, de la
mano con el tip anterior, es importante que
definas que vas a entregar hoy, mañana, o en
un mes. Prioriza y da una expectativa real a
tus stakeholders. Si tu agenda está llena para
hoy, ofrece otra fecha de entrega. Si es
indispensable tenerlo hoy, evalúa que
actividad puedes reprogramar y modifícala en
tu agenda.
Solamente tú sabes cuánto tiempo dispones y
cuanto te tomará realizar cada entregable, si no
lo comunicas, nadie podrá adivinarlo.
3. Diseña nuevas rutinas y rituales.
Para la mente, el simbolismo es muy
importante. Anteriormente, el momento en que
empacabas tus cosas y salías de la oficina, tu
mente sabía que era hora de relajarse. Ahora
casi todas las actividades ocurren en el mismo
lugar. Un ritual tan sencillo como apagar la
computadora y cerrar el cuaderno puede ser
poderosísimo para que tu mente entienda que
es hora de descansar. Igualmente, tender la
cama y desayunar antes de sentarte a la
computadora son una buena señal para que tu
mente sepa que es hora de enfocarse.
Son los pequeños rituales los que marcan la
diferencia entre un momento y otro, y pueden
volver a dibujar esta línea entre el trabajo y la
vida personal.
ALEJANDRA SAAVEDRA
Coach PNL y Terapeuta Holística
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